LA REENCARNACIÓN

En esencia somos vida,

Vida consciente y creativa,

Vida inteligente y gozosa,

Vida que se sabe vida,

Vida por lo tanto que vibra,

Vida en movimiento,

Vida fluyendo desde el corazón de sí misma,

Vida que es impulso,

Vida intencional,

Todo menos vida cerrada y muerta,

Vida posibilidad

De infinitas formas, contenidos y movimientos.

Vida individualizada y en crecimiento,

Vida evolucionando constantemente

Desde el más bajo e inconsciente ser

Al ser infinito nunca agotable ni abarcable,

Vida jugando al juego de Lo Divino,

Inventando y recreando todo

A través de artistas, poetas, científicos, artesanos

Y todo tipo de seres de este y otros mundos

Imaginados o por imaginar, creados o por crear,

En este u otros universos, incalculables,

También por Ella formados.

Vida que igualmente crea sus mecanismos de expansión,

No siempre los mismos, no de igual manera,

Aquí a través de cuerpos que agotados o inservibles entonces deja

O, simplemente, los abandona porque acabó su función,

Como el actor, que al terminar su papel en la obra

Suelta los ropajes, las provisionales formas

Del personaje que representó.

Pero la creatividad del ser es infinita

Y, por lo tanto, infinitas las posibilidades de representación,

Por eso, los nuevos cuerpos, las nuevas vestiduras y los otros contextos

Que tomamos de nuevo y que tomaremos cada vez que en nosotros exista

La intención y el deseo de experimentar, crecer, evolucionar y crear.

Esta es la esencia de la reencarnación,

De ese estar mi alma siendo desde tantos pasados eternos,

Desde lo mucho que he sido y que aún palpita en mi.

No he nacido por primera vez ahora, vengo de lejos,

En otros mundos y universos mi alma ha estado,

He sido muchas cosas y todas ellas están presentes en mí,

He recorrido todo el pasado de cada una de las especies

Y de la misma humanidad,

Por ello nada me es ajeno ni nada se halla separado de cuanto soy,

Un poco de todo eso y todo eso yo soy.

Así se expresa mi alma.

Dejaré este cuerpo sin dejar de ser yo,

Y entonces Viviré, plena y conscientemente,

Sin ataduras de tiempo ni espacio, libre,

Hasta que un nuevo impulso,

Como el de una primavera que viene

Me lleve a experimentar de nuevo y a ser

Con otra vestimenta, con otro cuerpo.