Para quienes se inquietan de un modo o de otro por
el más allá,
Porque no creen, dudan sobre él o temen por no saber
lo que se van a encontrar,
Creo que estaría bien hacer algunas consideraciones
basadas en el sentido común:
Afirmar que la muerte es nuestro fin es lo menos
científico que se puede decir de ella.
Porque nadie en sí mismo ha sido testigo de la
misma. ¿Dónde están las pruebas?
Hacemos interpretaciones basadas en premisas falsas
o en meras suposiciones.
Como la de decir precipitadamente que somos el
cuerpo. Conclusión rocambolesca:
Si ese no funciona, quien lo tenía ha dejado de
existir, o sea: se ha muerto. Se acabó.
Pero, por poco que uno se observe verá que lo más
esencial de él: pensamientos, sentir,
Comprensiones de la realidad, intuiciones, etc…no
son su cuerpo, y eso se percibe,
Sino que pertenecen a otro nivel de realidad que es
la que forma su mismidad o yoidad.
Si esa mismidad o sentir que se es conciencia
individual de ser no es nuestro cuerpo,
¿Por qué pensar o creer que lo que le pasa a él es
lo que nos sucede a nosotros?
Eso no tiene sentido.
Cierto, que nuestro ser es invisible para nuestros
sentidos físicos,
Ellos sólo registran una clase de vibración o
longitud de onda muy lenta o densa.
Es, con otros sentidos como se capta nuestra
esencialidad: con los ojos del alma.
Lo invisible para nuestros sentidos no significa que
no sea real.
Al contrario, eso es lo que nos hace sentirnos
reales, sabernos vivos y sobre todo: Vida.
El cuerpo, como tal, cerebro incluido, no sabe nada,
es materia inerte
Estimulada, vivificada y animada por la fuerza del
ser-conciencia que somos.
Y digo yo: si existe el mundo de la materia y para
los sentidos físicos, tan rudimentario,
¿Qué estrechez de mente nos lleva a creer que no hay
el mundo del espíritu o del alma?
Hay que ser muy poco imaginativos, muy desconectados
de nuestro ser
O tal vez muy orgullosos para negarlo. Sí, hay una
realidad espiritual. La esencial.
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