Lo Real es visto siempre pero no aprehendido. Está
ante nosotros y no nos enteramos,
Nos toca y no nos damos cuenta, nos embelesa pero
nos quedamos con el objeto.
Todo es lo que es por Lo Real que lo anima. El ser
de una piedra es Lo real,
El ser de la planta, de una obra de arte, de un animal
o un ser humano, de una montaña,
Todo nos muestra el rostro de Lo Real, pero nuestra
mente no está hecha para Lo Real
Sino que sólo sabe de contar objetos y de establecer
relaciones, poco más.
Lo Real sólo es percibido por Lo Real en nosotros. Nuestro
ser se exulta ante el Ser.
Y nuestro ser sólo capta el ser. Quien tiene su ser
despierto capta Lo Real.
Una cosa es ver, otra muy distinta es saber. El que
sabe experimenta lo que ve,
Saborea lo que ve, se vuelve uno con lo que ve y se
deja envolver por lo visto.
Entonces puede experimentar lo que es Lo Real, sin
nombre, sin forma, una no cosa.
Ver sin introducir en lo visto nuestra historia, ver
sin comparaciones, sólo ver,
Ver desnudo sin rasgo alguno de personalismos ni de
yoes egoístas. Ver.
Más allá de la razón, más allá incluso de los
sentidos y de cualquier interés: Ver.
Entonces surge Lo Real, lo descubrimos o, mejor, él
nos descubre a nosotros.
No hay separación, no hay distancia. Lo Real es en nosotros
y eso lo experimentamos,
Eso es lo que significa Ver. Ver a través de lo
visto. Ver a través de Lo Que Hay,
Que no son precisamente cosas, ni personajes, ni
historias, ni formas u objetos.
Ver de verdad es darse cuenta de repente de lo que
jamás habíamos visto ni percibido,
Pero que lo es y lo era todo, como el Océano respecto
a la ola. Ver el agua de la ola
Sin dejar de ver la ola. Ver Lo Real sin negar todas
las demás pequeñas realidades,
Ese es el Ver del que aquí hablamos. Ver la Presencia
que como el agua a la ola
A toda entidad la forma, la anima, la es. Esa
Presencia es Lo Real. La puedes Ver.
No hay comentarios:
Publicar un comentario